"Ustedes me buscan porque comieron hasta hartarse. Trabajen no por el alimento que perece, sino por el alimento que perdura, dando vida eterna" (Jn. 6:26)
Necesitamos alimentarnos del alimento que nos lleve hasta la plenitud verdadera, la Eucaristía, su Cuerpo y Sangre que nos salva, y que luego lo transformamos en amor. Sólo el amor da vida definitiva. Sólo el que sabe ver el dolor de los que sufren y escucha los gritos de los maltratados, puede escapar del engañoso atractivo de bienestar y buscar una vida nueva . Una vida que lleva al hombre a su plenitud...junto a Dios.
¿Gustas?
Comentario tomado de:
ResponderEliminar5 MINUTOS DE ORACION EN EL HOGAR.
#258 ABRIL 2010